Pruebas de autos argentinos

Citroën C4 2.0i 16v Exclusive 5 puertas - 2008 Listo para seducir Revista Parabrisas Nro 360. Octubre de 2008

Desde la planta de El Palomar ya sale la versión hatchback del exitoso mediano. Gana en diseño, ofrece buen nivel de equipamiento y será más accesible que el sedán

Desde hace tiempo existe una marcada tendencia hacia la recuperación del segmento de los autos medianos. Si se hace un poco de memoria, resulta que este nicho fue muy valorado en los años noventa. Luego, llegó la crisis y las automotrices -para capear el temporal-, se enfocaron en los autos chicos y accesibles.

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Hoy, poco a poco, los modelos pequeños, le van pasando la posta a los medianos, algo que, de alguna manera, reafirma el argumento de que se trata del auto que aprecia el conductor promedio argentino. En este sentido se nota la incorporación y renovación de varios modelos de cinco puertas como, por ejemplo, Chevrolet Vectra GT, Volkswagen Golf, Renault Mégane II, Nissan Tiida y el nuevo Ford Focus. A estos se suma el éxito indiscutido que viene teniendo el Peugeot 307, líder en su clase.

Para no quedar afuera, Citroën venía preparando la presentación de su C4 en versión 5 puertas. Un modelo que será lanzado en breve y que, según los responsables de la marca, superará la demanda del sedán, lo que significa que ganará rápidamente una porción del mercado. Se estima que en lo que resta de 2008 se venderán unas 2000 unidades.

Una de las ventajas con las que corre este Citroën es que se fabrica en el país pero, además, llegará al público con una gama sólida y bien equipada. Se ofrecerá un total de 5 versiones nafta (una automática) y 3 Diesel con un nivel de equipamiento muy satisfactorio. Hace algunos meses viajamos a Francia para tener un primer contacto; en esta oportunidad realizamos un test a fondo, antes de su lanzamiento, con la versión naftera 2.0 con equipamiento Exclusive.

Durante los días que manejamos la unidad de prueba llegamos a la conclusión que, si nos guiamos por las miradas de aprobación recibidas en la calle, el diseño de este C4 es atractivo. Contrariamente a lo que puede generar la versión sedán, este cinco puertas gusta mucho más.

Su remate guarda armonía de líneas, pero a la vez tiene un toque de frescura que lo emparenta con el pequeño C3. Dada su cola trunca, y las redondeces de sus formas, la imagen es mucho más atrevida y personal; además, resulta atractivo cómo se integra la línea de la tercera ventana lateral. Es notoriamente más corto que el modelo que conocemos, con una brecha de 510 milímetros a lo largo y con una distancia entre ejes 10 mm menor quedando en un largo total de 4.260 mm.

La plataforma y algunos componentes son los mismos que utiliza el Peugeot 307, aunque su fórmula es mucho más moderna. En términos aerodinámicos, su coeficiente CX 0,31 resulta satisfactorio.

En este sentido no tenemos más que sostener lo mismo que venimos diciendo de todos los modelos del grupo PSA que llevan el naftero de 2.0 litros y 143 CV. Es un propulsor de funcionamiento suave y elástico, ideal para circular por la ciudad en marchas altas sin molestos tironeos. El encanto de este tetracilíndrico se disfruta en la reacción que transmite andando en las avenidas a 60 km/h con la quinta conectada. Pero si lo que se busca es una respuesta contundente desde partida detenida, queda un poco en deuda con la falta de nervio por debajo de la 4.000 rpm, lo que obliga a estirar los cambios para obtener un poco más de reacción.

Al igual que en el sedán que probamos el año pasado, la velocidad máxima (199,2 km/h) la obtiene en quinta marcha a un régimen de 6.000 rpm, momento en que el motor pide un sexta a gritos, sobre todo para bajar el régimen de giro, el nivel de ruido y también el consumo.

La aceleración de 0 a 100 kilómetros por hora es de 9,7 seg. y la elasticidad en quinta de 80 a 120 km/h de 11,3 seg. En términos de rendimiento, con un litro de nafta especial este C4 recorre entre ruta y ciudad un promedio de 10,8 km/l.

He aquí el punto más delicado de este C4, ya que su menor distancia entre ejes -con respecto al sedán-, sacrifica un poco el espacio trasero. Y es en la plaza central en donde se viaja de manera incómoda ya que la forma del asiento y la curvatura del techo comprometen la comodidad.

Tampoco el espacio de cargas es el más generoso, los 320 dm3, están lejos de los 513 que ofrece el sedán, aunque si lo que se busca es un poco más de lugar existe la posibilidad de ampliar la capacidad al abatir los respaldos traseros.

La posición de manejo no presenta cambios, las butacas son amplias y cómodas pero deberían ajustar un poco más lateralmente. El volante se regula en altura y profundidad.
La percepción de calidad de materiales y terminación es similar a la del sedán.

El nivel de equipamiento es tal vez uno de los aspectos en donde el C4 5 puertas marca una diferencia a favor. Si se lo compara con la competencia, queda mejor parado por su amplia gama de versiones.

Además, este C4 es el único mediano de 5 puertas del Mercosur que en su versiones más equipadas dispone de control de estabilidad ESP, faros de xenón direccionales, air bags laterales/cortina, sensor de estacionamiento delantero y trasero y butaca del conductor eléctrica, entre otras cosas. También ofrece climatizador doble, tapizados de cuero y cruise control. Como faltante hay que considerar que no dispone de techo solar eléctrico.

Con respecto al instrumental, este Citroën mantiene el funcional y claro velocímetro digital ubicado en la parte superior del panel central en donde, además, se visualizan los niveles de temperatura del motor, el combustible, la autonomía restante y los odómetros. El cuenta revoluciones, también digital, continúa detrás del volante y su visualización no es demasiado clara. Por otra parte, posee un display que refleja las funciones de la computadora.

El comportamiento es otro de los ítems fuertes del C4 hatchback, su esquema tipo MacPherson en el tren delantero y el eje deformable trasero asociado a una barra estabilizadora se conjugan para formar una suspensión que en ruta es muy neutra. Huye de balanceos y el grado de dureza está en relación directamente proporcional al confort del auto.

Si lo comparamos con el sedán se lo nota un poco más saltarín; lógicamente, debido a su menor distancia entre ejes. En cuestión de apoyos, cuando se toman curvas veloces obtiene una buena nota en estabilidad. La dirección es directa y de respuesta rápida, en tanto que el tren delantero tracciona siempre con eficacia y sin perder adherencia. En este sentido juegan un buen papel los neumáticos Michelín en medida 205 con llantas de 16 pulgadas.

Los interiores respetan el patrón de diseño del sedán

Como dijimos, cuando se viaja en quinta marcha en ruta, el motor pide una sexta velocidad para desahogar, algo que todavía no está disponible ni siquiera en Europa.
El selector de cambios es suave y preciso, pero con recorridos un poco largos. Durante los procesos de aceleración, las ruedas delanteras no reflejaron patinamientos ya que dispone de control de tracción.

La mejor nota en seguridad se la gana por ser el auto que mayor equipamiento ofrece en este aspecto. Como sostuvimos, el ESP, los faros de xenón y los múltiples air bags lo posicionan un escalón por encima de la competencia.

Los frenos también cumplen bien con su cometido. Con cuatro discos y un ABS que funciona cuando es necesario, es posible pararlo desde 100 km/h en 40,6 metros. La visibilidad hacia atrás está un poco comprometida, aunque el sensor de estacionamiento atenúa en parte el problema.

No debe olvidarse que, cuando fue lanzado, el C4 sedán salió a romper el mercado con una política de precios muy agresiva. En ese debut aplicó una preventa súper atractiva con la que lograron vender más de 1.000 autos en sólo 20 días. Con esta versión de 5 puertas, Citroën tiene previsto realizar una preventa aunque todavía no se sabe si con el mismo nivel de agresividad.

Lo cierto es que es un auto cuyo precio será menor que el de la opción sedán (se calcula que alrededor de un 5% menos). Al cierre de esta edición no se habían dado a conocer los valores, pero estimamos que la versión de entrada de gama con el motor naftero 1.6 de 110 CV rondará los 68.000 pesos bonificado; precio bastante atractivo para un auto de su segmento. La garantía es, todavía, materia pendiente: sólo un año sabe a poco si se considera que hay autos que cuestan la mitad y ofrecen tres.

Por Augusto Brugo Marcó
Fotos Diego González

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CONCLUSIONES

Los más

Los menos

VELOCIDAD MÁXIMA 199.200 KM/H
En 5ta a 6.000 rpm

PROYECTO B51

El año pasado, con el lanzamiento del sedán, Citroën incursionaba en una estrategia riesgosa pero a lo vez fructífera: por primera vez mostraba la trastienda del proyecto de un auto.

Previo compromiso de confidencialidad, pusieron manos a la obra para que los periodistas especializados conociéramos cada etapa del desarrollo del auto, desde los proveedores y la fabricación hasta la estrategia comercial

Este año dicho proyecto se repitió bajo el código B57 y agregó algunos elementos interesantes. Entre otras cosas pudimos realizar los ensayos dinámicos previos con el instrumental de precisión que utilizan los fabricantes.

Además, nos permitieron exigir los autos al límite en un autódromo para comprobar hasta qué punto se mide cada elemento como los neumáticos, los frenos y el control de estabilidad.

Siempre con la presencia de la atenta Valentina Solari, responsable de la comunicación de Citroën, también visitamos las Sierras de Córdoba para analizar los modelos de la competencia (Volkswagen Golf Chevrolet Vectra GT-Renault Mégane, etc) y compararlos con el Citroën. En cada presentación intercambiamos opiniones con los responsables de cada área y pudimos conocer de cerca hasta los mínimos detalles.

En resumen, una idea original que permite mejorar la calidad profesional tanto para el que fabrica autos como para el periodista especializado. Finalmente, y aquí lo más importante, todo redunda en beneficio de nuestros lectores.

EQUIPAMIENTO

- Climatizador doble
- Dirección asistida
- 4 levantavidrios eléctricos
- Espejos eléctricos
- Cuatro air bags
- Columna de dirección regulable en altura y profundidad
- Cierre central de puertas con comando a distancia
- Faros antiniebla
- Autoestéreo con reproductor de CD y MP3
- Comando satelital de radio
- ABS
- ESP
- Guantera refrigerada
- Computadora de a bordo
- Limpiaparabrisas automático
- Butaca del conductor regulable en altura
- Tapizados de cuero
- Sensor de estacionamiento
- Cruise control
- Alarma

DETALLES

- Ambos parasoles poseen espejos iluminados

- Las teclas levantavidrios poseen sistema one-touch para subir y bajar

- Para abrir la tapa del tanque de combustible hay que hacerlo con llave, una tarea engorrosa

- La guantera posee luz y dispositivo que permite refrigerar bebidas

CORTE DE CINTA EN LA FÁBRICA

En la tradicional ceremonia del primer modelo fabricado no faltó la presencia de la Presidenta de la Nación y la cúpula del grupo PSA. En esa oportunidad se conocieron algunas cifras tales como que la producción será de 134.000 unidades y que el 55 por ciento será destinado a la exportación.

La cadencia diaria de la línea será de 80 unidades (lo que implica el trabajo de tres turnos). El mix, según fábrica, se ubicará en 10.000 sedanes y 8.000 bicuerpos. La marca espera llegara vender, en 2009, un total de 35.000 unidades El 75% de la oferta de C4 bicuerpo corresponderá a versiones nafta y 125% a motores Diesel

Vea también

Road Test del Citroën C4 HDi Exclusive
Revista Auto Test Nro 201. Julio de 2007