Pruebas de autos argentinos

Chevrolet Corsa II GLS 1.8 5p - 2002 Ahora sí Revista Auto Test Nro 138. Abril de 2002

Mucho más moderno, creció en sus dimensiones, se comporta mucho mejor, es más cómodo y ofrece un completo equipamiento. Probamos la versión "intermedia" que ya se produce, junto al resto de la gama, en la planta de Rosario

Como periodistas del rubro, durante los últimos dos años hemos criticado en reiteradas oportunidades la desactualización del Chevrolet Corsa Mercosur frente al nuevo modelo que Opel presentó en Europa a principios del 2000. Mínimos cambios estéticos y el agregado de versiones no eran suficientes para cubrir esa diferencia de "edad".

Aunque hasta la fecha el modelo goza de una muy buena performance comercial, siente el peso de rivales como el Peugeot 206 o el Renault Clio, que fueron capaces de destronar rápidamente a modelos exitosos pero anticuados como el VW Gol, que descansaba en el trono desde hacía varios años.

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Por lo tanto, ya era hora de renovaciones. Por estos días, General Motors de Argentina está presentando la nueva generación del Corsa Mercosur, basado en el modelo de Opel pero con algunas diferencias estéticas que líneas más adelante detallaremos. Se fabrica en la planta de GM en Rosario con configuraciones de carrocerías de cuatro y cinco puertas, a la espera de que se sumen otras variantes más adelante.

En cuanto a los motores, la nueva gama tendrá un naftero de 1.8 de 8 válvulas con 102 CV y el conocido 1.7 Diesel pero con el agregado de inyección directa, 16 válvulas y turbocompresor, eleva su potencia a 65 CV -el actual tiene 60-, aunque imaginamos que deben ser algunos más.

Unos cuantos días antes de la presentación, pudimos disponer de una versión GLS de cinco puertas con equipamiento intermedio ya que está por encima del GL y un poco por debajo del GLS Plus. A continuación, la prueba de un modelo que nada tiene que ver con su antecesor.

El diseño de la carrocería es totalmente nuevo y se distingue de la versión anterior sobre todo por el remate de la cola, con faros en altura y un portón de líneas "limpias". En la trompa se ha buscado obtener una imagen similar a la del Astra, de ahí las grandes diferencias con el modelo europeo, sobre todo por la parrilla. También se han eliminado todas las partes negras de la carrocería. De esta manera, los paragolpes, manijas de puertas, baguetas y espejos lucen el color de la carrocería.

Todas sus dimensiones han aumentado. Es 6,3 centímetros más largo, 3,4 más ancho y su distancia entre ejes, ahora de 2,49, se coloca como la más larga entre sus competidores. El ancho interior creció 2 y 3 cm en las plazas delanteras y traseras respectivamente en tanto el espacio está mejor aprovechado en relación a sus dimensiones exteriores, sobre todo en el sector posterior, en donde ofrece comodidad para dos personas de 1,70 a nivel piernas y cabeza, con el techo a generosa altura.

El interior es agradable y moderno, casi sin diferencias con respecto al modelo europeo. Nada fue heredado de la anterior versión, es todo nuevo. Es de destacar la ausencia total de ruidos en el habitáculo producto de buenos encastres de piezas, pero la calidad de algunos materiales es mejorable, más al tacto que a la vista; por ejemplo, el plástico rígido que recubre la parte superior de la plancha, la tecla de las balizas o los guarnecidos inferiores de las butacas.

Por tratarse de un dos volúmenes de dimensiones reducidas, los 271 dm3 del baúl no están nada mal; es exactamente igual que el del 206 y un poquito más grande que el del Clio bicuerpo.

En cuanto al equipamiento, este GLS tiene como accesorios destacables cuatro levantavidrios y espejos eléctricos, aire acondicionado, estéreo con CD, cierre centralizado automático (poco frecuente en este segmento) con mando a distancia, luces antiniebla delanteras y traseras, llantas de aleación y doble doble airbag, entre otras cosas. Se puede decir que es una dotación completa a la que habría que agregarle techo corredizo y ABS, disponibles en la versión Plus.

Al subir al Corsa lo primero que se advierte es una impecable posición de manejo (un punto flojo del anterior) gracias a la profunda pedalera, el volante alto (en esta versión no tiene regulaciones) y una cómoda butaca regulable en altura con un amplio rango de posiciones.

Todos los comandos están al alcance de la mano y son de la más sencilla operación, como el equipo de audio, de teclas enormes y bien separadas.

Como dijimos, las plazas traseras son ahora más espaciosas hacia todas las direcciones, sobre todo a lo largo; está entre los más habitables de su categoría.

El instrumental, con fondo blanco, tiene dos cuadrantes principales retroiluminados en color ámbar. La lectura es sencilla y nos sorprendió el poco margen de error del velocímetro. Completan las agujas para combustible y temperatura de agua pero no estaría mal un ordenador de a bordo, en tren de exigencias.

Aunque más firmes que en la anterior generación, el nuevo esquema de suspensiones conserva el correcto confort de marcha que siempre caracterizó al Corsa, algo que se valora en las cada vez más deterioradas calles de nuestras ciudades. Está bien insonorizado pero el motor es muy rumoroso al girar a regímenes elevados. El aire acondicionado, convencional, no merece críticas.

Entorno. Agradable puesto de comando y muy buena posición de manejo

Atrás quedaron los 1.6 de 8 y 16 válvulas. Aunque sea inicialmente, las versiones nafteras estarán equipadas con el conocido 1.8 de 8 válvulas que también equipa al Astra y que rinde 102 CV a 5.200 rpm. No se trata de un propulsor de los más modernos pero es noble en su funcionamiento. Aunque toma vigor recién al superar las 3.500 rpm, desde las 1.500 acelera progresivamente sin quejarse hasta el corte, a 6.400 rpm.

A nivel prestaciones, la velocidad máxima se ubica en un registro modesto con 177,3 km/h en el promedio de dos pasadas, lejos de los 185 del Clio de 110 CV. La aceleración de 0 a 100 km/h, en cambio, se ubica en valores correctos, con 11,79 segundos.

A pesar de que las relaciones de caja son bastante largas, las recuperaciones son las imaginables para un propulsor de esta potencia: pasa de 40 a 100 km/h en 4ta en 15,81 segundos (14,3 el Clio) mientras que el registro de 90 a 120 en 5a es de 10,84 segundos, sólo una décima por encima del Renault. El largo de las relaciones se advierte más en el tránsito ciudadano que en las pruebas de elasticidad.

En consumo no se destaca y menos en su autonomía con un tanque de sólo 48 litros. En circuito urbano necesita 9,1 litros para cubrir los 100 km mientras que en ruta a 120 km/h emplea 7,4 litros para recorrer esa distancia.

Para cerrar el rubro, el selector de caja es mucho más preciso, con recorridos bastante cortos y suave en el accionamiento. No se quejó en las pruebas de aceleración. Sólo zapateó bastante el tren delantero, pero hablamos de condiciones de utilización poco frecuentes para un usuario normal.

He aquí el gran cambio del Corsa. Las nuevas suspensiones, con la delantera montada en un subchasis y amortiguadores presurizados a gas, le otorgan un muy buen comportamiento; ya son historia las inclinaciones excesivas y la imprecisión del tren delantero. Demuestran un buen compromiso entre el confort de marcha -aunque es algo saltarín en los firmes desparejos- y el desempeño en ruta, con buena tenida y rolidos moderados.

Se caracteriza por su agilidad de reacciones; es muy fácil llevarlo en caminos "curvosos" porque aunque es netamente subvirante, al moderar la potencia al piso se puede lograr el efecto contrario y controlar todo de la manera más sencilla. Contribuye con su labor la nueva dirección, de respuestas rápidas y gran precisión, al contrario de la anterior. Además, el volante tiene un excelente grip.

Sólo anotamos como criticable la alta sensibilidad al viento lateral.

Amplias. Plazas traseras muy habitables, con generoso espacio para piernas

Ajustándonos al segmento que estamos analizando, el equipamiento de seguridad del Corsa GLS es correcto. Tiene doble airbag, cinco cinturones inerciales, cuatro apoyacabezas y antinieblas delanteros y traseros, además de las ventajas de la deformación programada y los refuerzos que ofrece una carrocería moderna. El GLS Plus, además, tiene ABS.

Y ya que hablamos de frenos, también son mejores que en la versión anterior. Las distancias son más cortas, no tiende al bloqueo prematuro y no se fatigan con tanta facilidad como en el Corsa Sport que probé hace un año. El pedal es algo esponjoso pero no molesta.

En cuanto a la visibilidad, es comprometida hacia atrás como en la mayoría de los bicuerpos de su tamaño. Hacia otros puntos no presenta complicaciones. Los espejos son muy generosos al igual que la luminosidad de los faros, regulables en altura.

Al cierre de esta nota no había un precio definido. Se supo que los valores iban a colocarse un 10 por ciento por encima de similares versiones de la línea actual. Este GLS 5p. costará cerca de $ 20.000. De ser así, no está mal y queda bien parado frente a la competencia.

Por Matías Antico
Fotos Miguel Tillous

Estilo. Sector trasero con faros en altura. Sin dudas, la gran diferencia con respecto al modelo anterior

.

CONCLUSIONES

A favor

• Comportamiento mejorado
• Dirección precisa
• Posición de manejo
• Espacio interior
• Equipamiento de confort

Defectos

• Calidad de algunos plásticos

• Motor ruidoso en alta
• Sensibilidad al viento lateral
• Relaciones de caja largas
• Tanque de 48 litros

Puntaje final: 371/500
(74.20%)

VELOCIDAD MÁXIMA 177.300 KM/H
En 5ta a 4.900 rpm

Fondo blanco. Agradable instrumental de lectura sencilla y escaso error

BREVÍSIMAS

- Inteligente. Para que las puertas cierren más fácil, al abrir cualquiera se abre una ventanilla unos 4 centímetros. A cerrarlas, vuelven a subir los cristales. Lo curioso es que si la llave no está en el contacto, siempre se abre la ventanilla delantera opuesta. Si la llave está en el contacto, se abre la ventanilla delantera del mismo lado que la puerta que se abrió.

- Práctico. En lugar de agarradera, del lado del conductor tiene un útil porta anteojos retráctil.

- Aviso. El testigo del antiniebla trasero se encuentra en el centro del cuadrante del velocímetro. Ideal para no encandilar al conductor que nos sucede cuando la visibilidad es normal.

- Otra de ventanillas. Al cerrar las puertas desde el telecomando, también lo hacen las ventanillas que estuvieran abiertas.

- Fumadores. El encendedor está fuera del cenicero, muy a mano del conductor.

- Chicas. Así son las teclas de levantavidrios en el apoyabrazos del conductor. A cambio, los cuatro tienen doble one touch.

- Bocina. Se acciona con botones sobre los rayos transversales del volante. Esa posición es incómoda y la dureza que ofrece es excesiva.

- Rectos. Los apoyacabezas se regulan en altura pero no en inclinación. Sería bueno para acercarlos a la nuca.

LAS PLAZAS TRASERAS SON AMPLIAS; HAY SUFICIENTE ESPACIO PARA LAS PIERNAS

EQUIPAMIENTO

Seguridad

- Airbag conductor y acompañante
- Apoyacabezas delanteros y traseros (2)
- Cierre automático de puertas
- Cinturones de seguridad inerciales adelante y atrás (3)
- Luces antiniebla delanteras y traseras
- Tercera luz de stop

Confort

- Aire acondicionado
- Apertura a distancia de puertas
- Apertura interna del tanque
- Asientos regulables en altura (conductor)
- Bloqueo central de puertas
- Bolsillos en respaldos delanteros
- CD Player y CD Changer
- Espejos de cortesía conductor y acompañante
- Espejos con comando eléctrico
- Levantavidrios eléctricos delanteros y traseros
- Limpia lavaluneta
- Luces de cortesía adelante y atrás
- Llantas de aleación
- Odómetro digital
- Parlantes delanteros y traseros
- Portamapas en contrapuertas delanteras
- Radio AM/FM
- Respaldo trasero rebatible completo / parcial

Funcionamiento

- Alarma sonora de luces encendidas
- Indicador de temperatura de agua
- Indicador de temperatura exterior
- Luz de reserva de combustible
- Regulación interna de faros
- Reóstato luz de tablero
- Testigo de mantenimiento
- Testigo de pastillas de freno

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Revista Road Test Nro 82. Agosto de 1997

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